La esencia y la razón de ser de la Armada no ha cambiado a lo largo de sus muchos siglos de existencia: la defensa de España y la protección de los españoles y de sus legítimos intereses en y desde la mar, allá donde sea necesario.

La Armada contribuye a garantizar la Defensa de España y es el principal referente de la acción del Estado en la mar, para lo cual necesita poder contar con una Fuerza Naval tecnológicamente avanzada, equilibrada, expedicionaria e interoperable con la de nuestros socios y aliados. Es por lo que participa en proyectos e iniciativas de la UE y de la OTAN, buscando las sinergias necesarias que le permitan conseguir una eficiencia en el mantenimiento y evolución de sus capacidades. La participación en estos proyectos, no solo permite dar una respuesta a las necesidades operativas de la Armada, sino que, además, los diferentes programas industriales asociados permiten reforzar el sector estratégico de la industria de defensa nacional.